viernes, 30 de mayo de 2014

Economía de guerra


Cuando tienes tu primer hijo, todo es poco para llevarlo guapo. Incluso compras cosas que no llegan a ponerse nunca. 

Cuando tienes el segundo, sobre todo si eres una cursi como yo, te emocionas queriendo llevarlos iguales. 




Llega el tercero y ya es la bomba, porque si los quieres llevar iguales surgen varias situaciones que complican todo:

1 - la economía es la que es. Los niños vienen con un pan debajo del brazo, pero no con una colección de Petit Bateau. ..

2 - tu hijo mediano puede heredar y heredar y heredar. ....en un bucle sin fin. Qué decir del pequeño si además es del mismo sexo....si te dejas llevar, te puedes encontrar con que durante 18 años(ya con pelos en las piernas) los niños van a la facultad con las mismas bermudas de rayas que compraste en su momento....

3 - tienes que planificar tanto tus compras para encontrar todo igual para los 3, que en diciembre ya estas comprando bañadores.



Bueno, pues yo hago algo de esto y algo de aquello, pero como buena planificadora que soy, no me gasto demasiado en su ropa.(bueno, eso depende del criterio de cada uno, pero yo me comparo con otras familias y veo que me organizo bien).  Somos 5 en casa:colegios, extraescolares, comidas y el simple día a día no me permite comprar todo lo que quiero y cuando quiero, así que me he vuelto cautelosa en mis compras de ropa. Busco lo BBB (buenos, bonitos y baratos), y creo que en general lo consigo.


No soy partidaria de comprar cosas caras para los niños, porque les duran poco. Pero sí prendas versátiles que pueda combinar con muchas cosas. 

Así que sabiendo que no a todos os gustará, ni que todos tenéis el mismo estilo que yo, yo vengo a hablar de mi libro....jejejejeje. 


Mi plan es contar aquí lo que yo hago para sobrevivir a las temporadas de compra de ropa, dónde compro y qué cosas veo que me gustan....Si te animas a contarme cómo lo haces tú, encantada de la vida.

Soy bastante clásica, en general, aunque de vez en cuando (sobre todo con la niña, tengo que reconocerlo) me doy algún gustirrinín de estilismos y me salgo de la línea...

Para tener inspiring moments, me paso por distintas fuentes: catálogos de marcas, revistas, etc. Pero también, y muy importante, por los blogs. Hay verdaderas maravillas de blogs que te da muchas ideas.

Así que hoy queda inaugurada esta nueva sección, en la que (cuando surja) iré enseñando cositas que me encuentro y descubrimientos que hago sobre la ropa de los niños. Espero que os guste....

Y sólo puntualizar una cosa: la ropa que les compro a los niños es para usarla. Si van al parque, se manchan;  si van de blanco, la lejía está para algo. Pero lo que no quiero que se manchen, lo que me hace sufrir y padecer,.....no se lo compro.

LOS NIÑOS SON NIÑOS, SE MANCHAN.



6 comentarios:

  1. no puedo estar más de acuerdo!! los niños se manchan! Y yo añado: y cuanto más sucios y pringosos, mejor se lo han pasado!!!

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  2. Cuánta razón tienes; yo voy por el segundo y he seguido la progresión tal y como lo has contado... Estoy en plena fiebre de la igualdad y el conjuntismo! los llevas muy guapos, vaya artista!!

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  3. Yo también quería llevar a mi bichilla monísima a todas partes y entonces descubrí lo que regurgita un bebé, las cacas que salen por todos lados y la rapidez con la que crece y la ropa se le queda pequeña- Desde ese momento en casa pensamos como tú: lo bueno, bonito y barato bienvenido sea y las pijerías vamos a dejarlas para cuando crezca a menos velocidad.

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  4. Yo a los míos les compro lo mínimo, total en unos meses no les cabe y hay que renovarles el armario por completo...

    Cuando dejen de crecer ya invertiré más en su ropa y zapatos :)

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  5. Tienes toda la razon. Para qué sufrir gratuitamente por la ropa. Para un diario hay que ir a lo practico y si hay una ocasion especial (BBC- bodas, bautizos y comuniones) pues ya tiramos un poco la casa por la ventana con algo mas especial.
    Yo solo tengo un niño pero para rizar el rizo, a la madrina molona y a mi, nos gusta llevarlos conjuntados a sus 2 niños y al mio, de vez en cuando.
    Nuestro truco: tiramos de Primark que es muy 'apañao'. ;-)

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  6. Yo llevo este año de pantalones con l'aînée... Ni te cuento. Ha habido semanas que ha venido con dos pantalones rotos por las rodillas. No me llegaba para comprar más pantalones. Y con agujero la he mandado a estudiar. Eso sí, cuando toca "repararlos", le toca al padre (que los recorta...)
    La petite hereda casi todo, pero a pesar de la diferencia de edad, están casi del mismo tamaño. Y algún capricho, de ir iguales, si me ha pasado, cuando he visto algo bien de precio.

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