Hacía
bastante que no escribía aquí. Ha habido muchos cambios en mi vida que me han
mantenido ocupada, y además parecía que mi propia musa, paradojas de la vida,
me había abandonado.
Hace
unos meses, mi vida profesional dio un giro de 180º: tras haber trabajado
durante 15 años en distintas empresas pero siempre en departamentos de compras
o ventas internacionales, las circunstancias hicieron que esta etapa terminase.
Y con miedo, pero también ilusión, empezó una nueva etapa.
Reencontrarme,
rebuscarme, conocerme....tanto en mi papel de madre (nunca había podido llevar
o recoger a mis hijos del colegio, por ejemplo) como en el de pareja (disfrutar
más sin pensar en los agobios y problemas laborales) y, por supuesto, en el
plano individual.
Este
último ha sido el más complicado. Tan acostumbrada a tener los minutos propios
acotados y limitados por los horarios de otros, me hicieron no saber cómo
gestionar todo el tiempo que ahora sólo dependía de mí. Así que ahí comenzó mi
camino, buscando un "qué quiero
hacer con mi vida".
Pero
tras unas, creo yo, merecidas vacaciones incluso de mí misma, marqué un punto
futuro en el que tendría que dar ese paso tan pensado y repensado. La lista que
me hice era corta pero complicada:
- ¿Qué quiero? Y no valían esas respuestas tipo
"la paz mundial". No, tenía que ser algo más concreto, y a poder ser
accesible de manera individual.
- ¿Qué
se me da bien? Bueno,
cristalino que la cocina y el DIY no son lo mío.
- ¿Cómo lo voy a hacer? Aquí ya se me caía la casa encima....
porque sin respuesta a las dos preguntas anteriores, ya me contaréis...
Y
mientras me hacía toda esta lista, iba conociendo a gente, charlando y
aprendiendo. Hablaba con mis amigos y seguía teniendo ideas de cómo podría éste
conseguir aquello que necesitaba o el otro contactar con aquel que era perfecto
para completarle en su proyecto...Lo normal en mí: muchas veces soy esa persona
a la que llamas preguntando si conoce a éste o aquél, si le puedo presentar a
fulanito o recomendar a menganito. Pero así seguía yo. El "consejos
vendo, para mí no tengo" es un clásico en mi vida.
Pero
analizando (con ayuda externa, la de Nuria Pérez que es quien me ha pegado los empujones - cariñosos- más grandes en este camino, ya sabéis que siempre los de fuera saben más y ven cosas que tú no) pude ver que exactamente eso
que yo hacía a diario, poner a gente en contacto, era lo QUE QUIERO HACER y lo
QUE SE ME DA BIEN. Ya tenía 2 de 3....me quedaba el CÓMO. Y este CÓMO es lo que hoy vengo a presentaros.
Y este es mi secretito....Nervios,
intriga y dolor de barriga....pero sobre todo muchas ganas y muchísima ilusión.
¿Y esto qué es?, pensarás.
Pues es mi nuevo hijito. Ahora sí que ya soy multipolar: Paula, La Musa,
@yonosuperwoman y ahora @stoneandsoup. Me voy a volver loca, jajajajaja.
Mi nuevo hijito se llama the Stone & the Soup, nombre bajo el que se presenta una página web que pretende ser un sitio virtual en el que se crean redes de contactos, sinergias, se promueven las colaboraciones y se facilitan los intercambios de servicios como una forma de colaboración en sí, todo ello en un ambiente de confianza, que viene dado por los intereses comunes de los usuarios, y por los proyectos presentados/recomendados.
Tal y como yo me lo imagino, es como si llegas nuevo a una ciudad y te pones a buscar una cafetería con la intención de que se convierta en "tu cafetería", "tu sitio", una especie de Cheers, MacLarens o Central Perk. Ese sitio al que vas porque sabes que están los que conoces, la gente en la que confías, con la que estás a gusto, a la que puedes preguntar por tal o cual cosa que necesitas. Este es el concepto para mí, para poder ser honesta conmigo misma: un sitio en el que estar a gusto, poder hacer lo que hago en mi vida diaria (recomendar a otros que molan y poner en contacto) y fomentar colaboraciones. Abrir la puerta a nuevas formas de colaborar, como el intercambio de servicios. Porque el mundo es muy grande y muchas veces a quien necesitas está más cerca de lo que crees (sea físico o a golpe de ratón)
Y por supuesto, hay unos “habituales”: aquellos que ya tienen su propia mesa, su lugar, y saben perfectamente cuál es la especialidad del día. Ellos serán los que nos iluminarán con sus ideas y propuestas, y nos ayudarán a inspirarnos. ¿Quiénes son estos habituales de The Stone & the Soup? Pues os diré que este proyecto, en sí mismo, es un ejemplo de colaboración, porque cuento con la crème de la crème de la blogosfera, gente que ha trascendido el mundo online para marcar un antes y un después en el mundo offline, y me siento la más afortunada por contar con ellos. Por ahora son pocos pero los mejores, y espero que vayamos creciendo con el tiempo. La reina del marketing y la publicidad, la mejor asesoría para emprendedores, una crack en social media....esos son algunos de los perfiles de colaboradores que estarán aquí.
¿Todavía no te imaginas cómo va a funcionar? Es que si te cuento todo, no tiene gracia...así que sólo te daré unas "pistillas":
- Se habla
- Se intercambia
- Se aprende
- Se comparte
Y, a grandes rasgos, porque tengo muchos planes con los que espero sorprenderos dentro de no mucho, esto es the STONE & the SOUP. Abriremos nuestras puertas el día 6, y me haría muchísima ilusión poder contar con vuestra presencia online para compartir ese primer café virtual sentados a la misma mesa.
Apuntaos la web www.stoneandsoup.com y estad atentos….¡¡¡os espero!!!
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