Siempre que se habla de maneras en las que colaboras socialmente, acabamos hablando (yo la primera) de maneras en las que ayudamos a otros materialmente: (lo cual es genial, eso por supuesto)
- donaciones de dinero (que me sobra o al menos no necesito tantísimo)
- donaciones de libros y juguetes (que me sobran)
- donaciones de ropa (que me sobran)
Hay mucha gente que también dedica su vida a ayudar directamente, de primera mano. Admirables, pero no es mi caso.
Pero mi día a día me empuja a buscar maneras en las que NOSOTROS, como familia, podamos colaborar con los demás. Y no solo a nivel de colaboracion directa, si no que quiero algo que ayude, con lo que podamos educar como principios aunque no veamos el resultado inmediato.
Mis hijos ya saben que el agua es un bien precioso, y que lo que usamos nosotros de más, se lo estamos quitando a otro. Por eso, no se debe desperdiciar.
También saben que debemos reciclar, porque la naturaleza es de todos. Este mundo que tenemos hay que cuidarlo.
No se debe gastar por gastar, cosas supérfluas, evitarlas.
El tema de no tirar comida lo tenemos bastante fácil, con una voluntaria de MSF en la familia que aporta su granito de arena al respecto: "¿que no quieres comerte esto? ¿Seguro? Mira que en Níger los pobrecitos niños no tienen comida....¿Seguro que no quieres?" (¿Manipulación? ¡Por supuesto, jajajaja!)
Pero seamos serios: ellos son niños, y nosotros vivimos en el mundo en el que vivimos. Tenemos mucha suerte, y eso hay que aprovecharlo, pero no desperdiciarlo. Es decir, no quiero obsesionarme con estas cosas que en mi realidad no serán factibles, pero sí quiero saber más para poder aportar mi granito de arena.
Para eso, y teniendo en cuenta que soy madre, trabajo fuera de casa y que soy una vaga, recurrir a mi amigo Google y buscar información online era lo mejor. Y he tenido la suerte de encontrarla. Online y gratuita. Y con un respaldo serio: MANOS UNIDAS
Manos Unidas describe el curso así: Con este curso, Manos Unidas pretende hacerte comprender que lo importante para ser parte del consumo consciente y transformador, y con ello parte de la solución a los problemas planteados por el consumo irresponsable, es pensar en aquellas cosas que puedes hacer tú, y no tanto en aquello que no está en tu mano.
Se llama CINCO VIAS HACIA EL CONSUMO RESPONSABLE. Esas cinco vías son: INFORMACIÓN, CONCIENCIA, RESPONSABILIDAD , DECISIÓN Y ACCIÓN.
Empieza el día 10/03.....Ya os contaré qué conclusiones saco de todo ello....
Por si os interesa, el link aquí.
Amén hermana!
ResponderEliminarAplicar en todo las 3R = reduce, recicla y reutiliza... a las que en los tiempos que corren se ha sumado la cuarta R, unos dicen que es repara - que yo creo que está entre recicla y reutiliza la verdad - otros dicen que es rechaza - yo la veo parecida a reduce... así que prefiero: RETRANSMITE, cuéntaselo a todos y convence a los demás, que aquí todo el mundo tiene que hacer su parte! :)
ResponderEliminarGenial reflexión, Paula. El consumo responsable, las cuatro R de Remorada (con ella 5 ;P)... Todos podemos hacer pequeños gestos para, por un lado, hacer de este mundo un proyecto viable, y por otro, educar a nuestros hijos en ese valor. Mucho más importante de lo que en principio pueda parecer.
ResponderEliminarGracias por invitarnos a la reflexión!!!
Tienes mucha razón, como Remorada y Trimadre. Nos hemos creado muchas necesidades innecesarias y eso no les hace ningún favor a nuestros hijos.
ResponderEliminarMuy interesante Paula y muy cierto. Vivimos en una sociedad consumista en la que todo va rápido, enseñar a nuestros hijos el valor de las cosas es indispensable para educarlos de manera responsable.
ResponderEliminarInteresante. Siempre que mi marido y yo hablamos sobre la educación de nuestros hijos, lo más importante es que sean felices, pero además que crezcan teniendo unos valores y estos deben venir enseñados desde casa.
ResponderEliminarPara mí, es muy importante saber tratar bien a las personas, que sepan que todos somos iguales, que sepan compartir y apreciar lo que tienen. Hoy en día, por suerte o por desgracia, tienen de todo y muchas veces tema de pelea, en casa, sin venir a cuento, se encuentran con regalos por parte de los abuelos que no tienen sentido y poco a poco vamos consiguiendo que esto se vaya zanjando. Que sepan que cada cosa tiene su valor. Que no se puede malgastar el agua (el mayor, ya en primero de primaria, en Cono lo ha estudiado... y no veas cómo lo pone en práctica)... que hay que separar la basura... y una cosa con la que no puedo, que hay papeleras que no se tira nada al suelo, así va mi bolso a veces... jaja, si no encuentro papeleras.
Y que los dueños de los perros son unos guarros (no todos pero la gran mayoría, sí, al menos aquí)... nos vamos encontrando cacas metro sí y metro también y los pobres niños ven cómo me enciendo...
Bueno musita, me voy al parque con mis bichos aprovechando un poco de sol, que he quedado con otra amiga y nos vamos a tomar un cafelito que he preparado... uhmmmm. Cuál es tu plan? ;)
Luego entro en la web de Manos Unidas para leerlo todo más tranquila
Buen enfoque Paula. Pero mira que es difícil transmitir ciertos valores... La Prole sabe qué se recicla en cada sitio, que las hojas se pintan por los dos lados y luego se reutilizan para manualidades, que no hay que tirar de la cadena sin más, que se deben apagar las luces... Todo muy bien. Pero,ay! con el asunto de gastar:"me compras...quiero...pepita tiene esto y porque no me traes uno a mí..." Eso es más complicado. Aunque no queramos, trasmitimos malos ejemplos más a menudo de lo que nos gustaría... le echo un vistazo al link de Manos Unidas. gracias!!
ResponderEliminarpues me encantará leer tus conclusiones, yo no me apunto porque no voy a poder hacerlo con el nacimiento y la adaptación, así que esperaré tu post!, besos
ResponderEliminarJo!, Paula, estás en todo. Pues yo, la verdad, es que -y me da vergüenza decirlo- no reciclo. Sé que está mal, muy muy mal, pero es algo a lo que no me hago la idea. Por lo demás, sí que intentamos educar a las niñas, sobre todo, en la idea de consumo responsable, reciclando y reutilizando todo lo que está en nuestras manos. Pero, sobre todo, quiero que sean conscientes de lo afortunadas que son, no por las cosas materiales que poseemos -que también- sino por el entorno favorable en el que se están criando, con personas que las quieren y se preocupan por ellas.
ResponderEliminarMuy interesante y para reflexionar, al menos yo que me da una pereza tremenda lo del reciclaje y a veces van las cosas donde no deben!!
ResponderEliminarUn besito y gracias por hacernos pensar que es necesario para todos!
Yo debo reconocer que justo estos valores serían los que me gustaría inculcar a mi bichilla. en mi casa, por suerte, nunca nos faltó de nada y aún así nos criaron sabiendo apreciar, valorar lo que tenemos y ahorrar para tiempos peores. Espero que esta aprenda así, para que luego nadie venga a decirle que ha vivido por encima de sus posibilidades, y que además sea consciente de que hay quien no dispone de tantas comodidades como ella y aún así pueden vivir felices con lo justo.
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